El joven perdió la visión en noviembre de 2019 de ambos ojos al recibir perdigones disparados por un carabinero.
El estudiante aseguró que «nunca se nos ha acercado nadie del Gobierno», pese a que «tuvieron el descaro de decir que sí».
Gustavo Gatica Villarroel, el joven que en noviembre de 2019 perdió la visión de ambos ojos al recibir perdigones disparados por un carabinero, afirmó este lunes que el mundo no condenó con la suficiente dureza lo que ocurrió durante el estallido social en Chile.
En una entrevista con EFE, el joven indicó que está dispuesto a seguir denunciando la represión policial que afectó las protestas desde octubre de 2019, que dejaron una treintena de muertos y miles de heridos.
«Hay una falta de condena a nivel mundial de lo que pasó en Chile y apelamos a la presión extranjera, siento que es mucho más importante que la presión venga desde afuera que la que podemos hacer desde acá dentro. Tal vez, si se hubieran pronunciado más fuerte organismo extranjeros, las cosas no hubieran sido así», lamentó el estudiante de psicología de 23 años.
En la misma línea, indicó que su objetivo ahora es «exponer lo que pasó aquí y que se haga justicia desde afuera. Lo he hablado con muchos sobrevivientes de la revuelta y nos gustaría que hubiera un juicio internacional y que Piñera quede preso».
«El Gobierno nunca me llamó»
Por otra parte, el joven denunció que desde el Gobierno nunca se contactaron con él tras el hecho y que la atención que recibió en su proceso de recuperación no ha sido la adecuada.
«Cuando me dispararon me llevaron a una clínica privada, pero luego estuve en la UTO (Unidad de Trauma Ocular, el departamento de un hospital público de Santiago) y la atención fue muy mala«, acotó Gatica a EFE.
«Se nos hacía muy pesado tener que esperar horas, es una doble victimización. Esa es la poca ayuda que hemos tenido. Nunca se nos ha acercado nadie del Gobierno, de hecho tuvieron el descaro de decir que sí«, detalló la víctima de daño ocular.
Sobre Claudio Crespo, el ex oficial de Carabineros imputado por dejarlo ciego, el joven estudiante lamentó que el ataque fue en 2019 y «recién en agosto de 2020 lo detuvieron, nueve meses después»
«Dentro de poco se van a cumplir dos años y aún no ha empezado el juicio. Nos hemos acostumbrado a la lentitud de la justicia, hay que ser pacientes y confiar, pero tengo el presentimiento de que sí va a haber justicia en mi caso«, indicó Gatica, quien también señaló que «esto no va a ocurrir en la mayoría de los casos».
También reveló que «no volvería atrás» para cambiar el día en que le quitaron la vista, ya que «la vida te quita y también te da y ahora puedo aportar desde otro área».
«La nueva Constitución traerá cambios»
En tanto, sobre el proceso constituyente, Gatica puntualizó que «traerá cambios y será una ayuda»para el país, además, reconoció que le ofrecieron ser constituyente pero lo rechazó porque «hay gente mucho más preparada para estar en ese espacio».
«La nueva Constitución no va a traer todas las respuestas, pero sin duda va a ser una ayuda. Estamos en el país más neoliberal del mundo, donde está privatizado todo, hasta el agua. Creo que se van a poder hacer cambios, aunque va a estar peleado porque se van a necesitar dos tercios para avanzar en cualquier tema», detalló el joven.
El estudiante afirmó que se llegó a este proceso -que incluyó la gran movilización social del 2019- porque «en los 30 años de democracia hubo miles de marchas y no hubo cambios, al contrario, se privatizaron aún más servicios. No se consiguió nada».
Finalmente comentó que «no se siente cómodo» cuando lo consideran un icono, al igual que Fabiola Campillai -mujer que también quedó ciega tras una bomba lacrimógena disparada por Carabineros-, dado que «me gustaría volver a retomar mi vida, pero a estas alturas no creo que sea tan factible. Es difícil salir a la calle y que no me reconozcan«.
Fuente: cooperativa