Muy firme en el tercer lugar se mantiene Francisco Chaleco López (Red Bull / Can-Am Factory Racing) junto a su navegante Juan Pablo Latrach, luego de disputar la Etapa 8 con cero faltas, quedando a 42 minutos del líder en la general, Mitchell Guthrie, y a 7 minutos 12 segundos de su antecesora, la española Cristina Gutiérrez.
En una jornada positiva para los chilenos que no tuvieron ningún pinchazo, pese a que ya se inicia la zona de piedras y rocas en el horizonte del desierto saudí, alejándose de las dunas. En este contexto, el binomio nacional cuidó la máquina Can-Am con una estrategia que resultó. La etapa fue para el local Saleh Alsaif con 3 horas 55 minutos 28 segundos, seguidos de Mitchell Guthrie, Cristina Gutiérrez y Chaleco López, que fue cuarto.
En la clasificación general, Guthrie sigue de puntero con 37 horas 08 minutos 19 segundos. Más atrás están Cristina Gutiérrez a 34’03» y López Contardo a 42’51». Cuarto está el lituano Rokas Baciuska a 01:28’39».
«En la Etapa 8 anduvimos bien y no rompimos ningún neumático, que es lo que más nos preocupaba. Tiramos fuerte en las dunas y seguimos terceros en la general. Lo importante es que estamos a un poco más de 7 minutos del segundo lugar. Quedan cuatro etapas súper duras. Ahora vienen las zonas de piedras, ya que las dunas se alejan. Vamos a intentar ser constantes en lo que queda. Hoy anduvimos bien en la navegación, al igual que el auto que no tuvo ningún inconveniente. Trataremos de no cometer errores para seguir en la pelea», comentó Chaleco López.
La caravana llegó a Ha’il, cuna del deporte todoterreno en Arabia Saudita en una especial que se vio interrumpida por un largo traslado que se dividió en dos partes, colocando a los pilotos y equipos en dos entornos contrastantes. En esta etapa de dos mitades, con 279 kilómetros cronometrados, los competidores se enfrentaron primero sobre una gruesa capa de arena, a veces en forma de dunas, pero no siempre fuera de pista. Durante los últimos 100 kilómetros o más antes de la meta, la carrera concluyó en pistas rápidas con varias zonas rocosas que requirieron mucho cuidado.
Los corredores pasaron la noche junto al aeropuerto de Ha’il, donde enfrentarán la novena etapa hacia Al Ula con un recorrido de 639 kilómetros, de los cuales 417 serán de primes, que supone un regreso a la ruta del Dakar del año pasado. Las principales exigencias serán una navegación complicada, extensiones rocosas y pedregosas que mantendrán alerta a los pilotos y navegantes..