La Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) ratificó la sanción contra el jugador chileno Felipe Hernández, quien ha sido suspendido durante tres años tras dar positivo por dopaje en un control realizado en el torneo M15 Quito, en junio del 2022.
La ITIA confirmó que el tenista de 22 años asumió los cargos imputados bajo el Programa Antidopaje de Tenis (TADP). Hernández, que estaba en el puesto 1.179 del ránking ATP en el momento de la prueba, arrojó positivo en nandrolona y sus metabolitos, sustancias prohibidas por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) y que permiten el crecimiento muscular.
“En diciembre de 2022, el jugador admitió tanto la presencia como el uso/intento de uso de nandrolona y, por tanto, el incumplimiento de los artículos 2.1 y 2.2 del TADP de 2022”, señala el comunicado del organismo internacional.
El artículo 10.2.1 del TADP especifica que una infracción del artículo 2.1 o 2.2 del TADP que sea ‘intencionada’ y sea una primera infracción conlleva una suspensión obligatoria de cuatro años. Sin embargo, el Artículo 10.8.1 del TADP establece una reducción de un año basada en la admisión y aceptación de una sanción.
El dopaje de Felipe Hernández fue el tercero que afectó a un chileno durante 2022, ya que anteriormente Bastián Malla fue suspendido por un mes por consumo de sustancias prohibidas, situación que también tiene a Bárbara Gatica en proceso de apelación. De todas formas, la jugadora nacional fue suspendida por tres años del tenis profesional por amaño de partidos.