A partir de 2024, la competencia de clubes más importante de la UEFA pasará a contar con la participación de 36 equipos, en lugar de los 32 que hay en la actualidad. El formato de disputa y la bronca de los hinchas.
El Comité de Competiciones de la UEFA se reunirá en los próximos días para aprobar el nuevo formato de la Champions League, que, en caso de ser ratificado el martes por el congreso, empezará a regir en 2024 y que se extenderá, en principio, hasta 2027. Se trata de un sistema de disputa absolutamente diferente al actual que, entre otras cuestiones, incrementará el número de participantes, elevándolo de 32 a 36 equipos.
Este nuevo formato, inspirado en la sistema suizo, deja de lado la fase de grupos para pasar a un todos contra todos virtual, con una única tabla clasificatoria. En esta primera instancia, cada equipo jugará diez partidos -cinco de local, cinco de visitante- contra rivales de diferente coeficiente, librados al azar: habrá cuatro bombos que tendrán en cuenta las posiciones en las ligas y también las últimas actuaciones en la competencia. Es decir que no todos podrán enfrentarse entre sí.
Clasificarán directamente a los octavos de final aquellos equipos que, una vez disputados estos primeros diez partidos, se encuentren ubicados entre la primera y la octava posición de la tabla; mientras que los que finalicen entre el 9° y el 16° lugar enfrentarán a los que acaben entre los puestos 17 y 24 por una plaza en la mencionada instancia de octavos. A partir de ahí, se jugará el formato habitual hasta la final.
La Champions League cambiaría de formato a partir de la temporada 2024/2025.
Serán, en total, 100 los partidos que van a disputarse bajo este nuevo formato en cada edición de la Champions, lo que permitirá un importante incremento en lo que refiere a los derechos televisivos. Esto implica también que el equipo que se lleve el título deberá jugar 17 encuentros (diez de la primera fase a los que se suman octavos, cuartos, semifinales y final), contra los 13 que disputa en la actualidad.
Sin embargo, no todos están de acuerdo con los cambios impulsados por la UEFA. De hecho, en las últimas horas, hinchas del París Saint-Germain y el Olympique de Marsella, rivales acérrimos en la Ligue 1 de Francia, han enviado una carta -firmada por integrantes de ambas parcialidades- al presidente de la Asociación de Clubes Europeos, Andrea Agnelli, en oposición a la reforma. «Su plan, basado en el aumento en el número de partidos, la introducción de una clasificación basada en resultados pasados y la apropiación de los derechos comerciales de la competencia, amenaza la integridad de todo nuestro deporte», expresan en la nota en la que dejan claro que, desde su punto de vista, estos cambios sólo «ampliarán la brecha entre los ricos y el resto, destruirán los calendarios nacionales y exigirán que los aficionados sacrifiquen cada vez más tiempo y dinero para seguir a su club».
La Superliga europea, una alternativa
Algunos de los equipos más importantes de Europa no desisten en la idea de sacar adelante la Superliga. Los trabajos para la creación de la que sería una nueva competición siguen adelante y lo hacen al margen de la UEFA, organismo que con este cambio ha buscado más encuentros y más dinero para contener el movimiento de la citada Superliga europea.
VÍA: OLÉ
