Si antes había que llamar a un centro o mandar un email para reservar una cancha de pádel -deporte cuya práctica se popularizó en plena pandemia- hoy, con solo un par de clicks, se puede no solo asegurar un espacio, sino que hasta encontrar rival. Aquí, dueños de clubes y desarrolladores cuentan las ventajas de usar estas tecnologías y por qué llegaron para quedarse.
La historia del pádel data desde hace 60 años, cuando en 1962 el mexicano Enrique Corcuera levantó un muro de cerca de tres metros de altura en su casa de Acapulco, opuesto al que ya tenía; luego puso una red en el medio, cerró los costados con muros más bajos y comenzó a jugar tenis, pero con una nueva regla: se podían utilizar las paredes.
Durante las siguientes décadas, esta nueva modalidad creció y se desarrolló en España, se expandió a Argentina y progresivamente fue recalando a otros países.
Sin embargo, fue recién hace un par de años que este deporte se masificó en Chile, y lo hizo de forma desenfrenada. El boom en otras latitudes, la pandemia y la facilidad para jugarlo tuvieron un papel esencial para que hoy haya cientos de miles de personas practicando pádel a lo largo del país. De hecho, el World Padel Tour –certamen más relevante de este deporte– incorporó en su calendario a Chile dentro del circuito; algo impensado hasta hace algunos años.
“Tenemos un poco más de 600 mil deportistas que ocupan nuestra plataforma, y hoy tenemos alrededor de 370 mil reservas al mes; de ellas, unas 130 mil corresponden al pádel y lo demás al resto de los 25 deportes que tenemos. Son cuatro los más importantes: pádel, tenis, futbolito y golf, pero también kayak, pelota vasca o surf”, grafica Daniela Baytelman, CEO y cofundadora de Easycancha, aplicación que permite reservar canchas de distintos deportes con apenas unos clicks.
Según las cifras de Baytelman, hoy el pádel se lleva el 35% de sus reservas; a mediados de 2019 el 50% se lo llevaba el fútbol, un 40% el tenis, y el resto se repartía el 10%. Tanto ha sido el masivo interés que, según la cofundadora de Easycancha, “es un boom que no para. Te diría que hoy día están abriendo dos clubes a la semana, que nos contactan, nos cuentan que están abriendo su club de pádel y que necesitan funcionar con Easycancha”.
Juan José Covarrubias, uno de los siete socios del club Padel Rinconada, relata que él antes trabajaba en el lado del fútbol del club, donde había 17 canchas de futbolito, hasta que el dueño lo invitó a ser socio y el 1 de octubre de 2019 abrieron las cuatro primeras canchas de pádel. Tuvieron una marcha blanca para que la gente fuera a probar y conocer el nuevo club del deporte, pero con el estallido social y luego la pandemia funcionaron de forma intermitente.
“Cuando volvimos abrir, en septiembre de 2020, la diferencia fue gigante. Con el teletrabajo la gente jugaba mucho en las mañanas, que antes para nosotros era un horario súper bajo, con canchas libres. Pero cambió, y qué decir en el horario alto, estaba lleno desde las seis de la tarde hasta el cierre, pasadas las 11 pm. Se nos dio la oportunidad de hacer ocho canchas más y no lo dudamos con el resto de los socios”, dice.
Todo este interés por el pádel también ha cambiado la forma de administrar las reservas y la logística dentro de los clubes. Así como irrumpió con fuerza Easycancha, también los centros han gestionado sus propias aplicaciones. “Lo que me motivó, en lo personal, a tener una app propia fue que tenga nuestro nombre. O sea, aparece como Padel Rinconada, entonces nos reconocen, se pueden organizar partidos ahí mismo, tiene chat de WhatsApp integrado y tenemos todo ordenado por categorías. Nos facilita mucho”, argumenta Juan José Covarrubias.
Una de las firmas que desarrolla software para poder gestionar los centros deportivos, y que tiene entre sus clientes a Padel Rinconada, es la española TPC Matchpoint, que ofrece una plataforma de gestión y una app para que cada club tenga mejor control de su gestión. “De cara al club, la ventaja es poder hacer comunidad alrededor de él y así una mejora de la marca, de la empresa. Mientras que, para los jugadores, el beneficio es tener a la mano los servicios de un club de confianza. Antes de la pandemia ya se veía un cambio y s empezaron a construir clubes, pero claro que la crisis ayudó”, comenta Rubén Ceresuela, gerente y representante en Chile de TPC Matchpoint.
Hasta hace no muchos años, la forma que había para poder arrendar una cancha de futbolito o de tenis era más o menos la misma: escribir un correo o tomar el teléfono y probar suerte club por club para encontrar una hora disponible. Luego, había que llegar antes para pagar y así entrar a jugar.
Las aplicaciones llegaron a cambiar el paradigma: ahora basta con crearse un usuario, seleccionar una cancha y pagarla. Sin intermediarios. Esa fue una de las premisas de Daniela Baytelman junto a Roberto de Campos para partir con Easycancha. “Ya nadie llama, todo se hace con un par de clicks: buscar cancha, dejarla pagada y llegar a jugar”, dice la CEO.
¿Cómo operan? La cofundadora explica que los clubes se contactan con ellos y les entregan toda la información pertinente del club: horarios, cantidad de canchas, los precios y otros servicios. Luego, se les hace una capacitación para poder manejar la plataforma de la que disponen, en donde pueden agendar nuevas reservas, anular otras, revisar los reportes de datos, gestionar a sus clientes y comunicarse con ellos.
“Tenemos un gran sistema que lleva toda la información que se dispone para los clubes, pero son ellos los que definen qué ve el usuario, si desea que el calendario esté disponible solo para siete días, u otras configuraciones”, dice Baytelman.
Juan José Covarrubias, socio de Padel Rinconada, recuerda su experiencia trabajando en el club –que existe desde 2010– con otra plataforma que resultó no ser eficiente. “Era una página web que no era responsiva, no era amigable para el celular, había que mover el dedo para acá, para allá, algo que con nuestra app cambió por completo”, asegura.
Por eso, el desarrollo de una aplicación les dio distintas ventajas.
“Como nosotros también funcionamos con gimnasios, clubes de socios, de tenis, tenemos distintos módulos. Lo más básico para un club de pádel es el módulo de reservas, de clases particulares y venta de artículos, pero también tenemos para organizar y gestionar campeonatos, actividades dentro del club, de las ramas deportivas y también un espacio para partidas y para encontrar a otros jugadores”, detalla Rubén Ceresuela, de TPC Matchpoint, empresa que está en más de 25 países con 800 clubes de distintas ramas, teniendo más de 150 en Chile según el gerente.
De hecho, la última característica que menciona el representante de la firma española es una de las que más innovadoras y que hoy todas ofrecen. Esta función permite encontrar rival para jugar según el nivel y las características que se busquen. Para acceder a ella, basta con llenar el perfil, seleccionar un deporte, elegir el nivel que se tiene, indicar si es diestro o zurdo, los días y horarios disponibles y qué se busca en el rival, si alguien más competitivo o más relajado.
Al procesarse la información, se muestran las opciones disponibles y se desafía a otro jugador. De aceptar, se habilita una sala virtual privada donde podrán coordinar los detalles del partido. Luego, se registran los resultados y, lo más importante, se evalúa el comportamiento del o los rivales, algo que va definiendo su reputación; una calificación en la que se consideran aspectos como respeto, responsabilidad y puntualidad.
De parte de los clubes, también hay otras ventajas respecto de la administración y la gestión propia del club. Sobre todo porque pasaron de utilizar cuaderno y papel, o Excel. “Hay para controles de stock de otros artículos, e incluso clubes que ahora están incorporando controles de acceso”, dice Ceresuela.
¿De qué tratan estos controles? Es un manera sencilla de hacer una reserva e ingresar sin intermediar con un personal, pues, según la aplicación, se entrega una “llave” para abrir una cancha y cerrarla al momento de terminar. Daniela Baytelman revela que están aplicando eso al club de Padel Sanhattan, que funcionará 24/7. “Pagas, se genera un código QR, llegas a la hora que te corresponde y con ese código se abre la puerta y se cierra. Es una forma de solucionarle el trabajo a los dueños de pádel”, señala.
Por otro lado, Juan José Covarrubias, de Pádel Rinconada, destaca que en el caso de ellos pudieron aplicarlo al quiosco que disponían, y así manejar el stock; además de poder abrir y cerrar caja de manera más eficiente.
Pero hay una función fue más importante aún: el pago previo. Antes de estas aplicaciones, las reservas no comprometían siempre el depósito previo, por lo que, si no llegaban los jugadores, la cancha quedaba vacía y si había suerte se podía volver a arrendar en el mismo lapso; si no, había pérdidas de dinero.
Por eso, a través de la aplicación se exige el pago de antemano. “Incluso evita a los mal intencionados que arrendaban y no iban. Claro que cuando una persona no puede ir por fuerza mayor, y nos avisa con tiempo, la plata se le devuelve o le queda abonada”, dice Covarrubias.