Un equipo de investigadores de la Universidad de Columbia Británica que trabaja en el desarrollo de tabletas de insulina oral como reemplazo de las inyecciones diarias de insulina ha hecho un descubrimiento revolucionario.
Los investigadores han descubierto que ratones absorben la insulina de la última versión de sus tabletas orales de la misma manera que la insulina inyectada.
“Estos emocionantes resultados muestran que estamos en el camino correcto en el desarrollo de una formulación de insulina que ya no necesitará inyectarse antes de cada comida, mejorando la calidad de vida, así como la salud mental, de más de nueve millones de diabéticos tipo 1 en todo el mundo”, dijo en un comunicado el profesor Dr. Anubhav Pratap-Singh, el investigador principal de la Facultad de Sistemas Terrestres y Alimentarios de dicha universidad.
Él explica que la inspiración detrás de la búsqueda de una insulina no inyectable proviene de su padre diabético que se ha estado inyectando insulina 3 o 4 veces al día durante los últimos 15 años.
Según el Dr. Alberto Baldelli, miembro sénior del laboratorio del Dr. Pratap-Singh, ahora están viendo que casi el 100 por ciento de la insulina de sus tabletas va directamente al hígado. En intentos anteriores de desarrollar una insulina potable, la mayor parte de la insulina se acumularía en el estómago.
“Incluso después de dos horas de parto, no encontramos insulina en los estómagos de las ratas que analizamos. Todo estaba en el hígado y este es el objetivo ideal para la insulina; es realmente lo que queríamos ver”, dice Yigong Guo, primer autor del estudio y candidato a doctorado que trabaja de cerca en el proyecto.
Cuando se trata de la administración de insulina, las inyecciones no son las más cómodas ni convenientes para los pacientes con diabetes. Pero con varias otras alternativas de insulina oral que también se están probando y desarrollando, el equipo de UBC trabajó para resolver dónde y cómo facilitar una mayor tasa de absorción.
El equipo de la Dra. Pratap-Singh desarrolló un tipo diferente de tableta que no está hecha para tragar, sino que se disuelve cuando se coloca entre la encía y la mejilla.