La Casa de Estudios de Universidad de Chile, a través de los directores Carolina Coppo y Andrés Weintraub, manifestó su descontento con la administración de Azul Azul y llamó a la concesionaria a “enmendar el rumbo”.
“Nos encontramos desde hace tiempo disconformes con la manera en que se administra y gestiona la concesionaria por parte de sus actuales controladores”, comienza la carta de la Casa de Estudios.
“Las diferencias no se reducen solo a los objetivos del fondo de inversión que es propietario, el cual no parece estar comprometido con la historia y tradición de la U, sino que también se extienden a otros aspectos, en particular al proceso de toma de decisiones y a la relación y comunicación del club con la hinchada”, agregó el documento.
En el comunicado se informó que “hemos hecho presente y solicitado en múltiples oportunidades mayor discusión en el Directorio”. Además, cuestionaron la administración de Azul Azul. “La toma de resoluciones por parte de una sola persona o una cúpula que no formula propuestas alternativas, no discute y en consecuencia no reflexiona, conduce muchas veces a decisiones erradas”, afirmó.
“Lo anterior se demuestra en una mala gestión cuyos resultados están a la vista”, añadió el documento.
“Estimamos que los cuestionamientos a la transparencia en la propiedad del Club y las dudas que circulan en la opinión pública respecto de eventuales vinculaciones que pudieren existir entre sus autoridades y representantes de otros clubes y de jugadores, por la incertidumbre que ello genera en la comunidad, ponen en cuestión la transparencia y probidad, y no se condicen con los valores y principios que inspiran el actuar de la Universidad de Chile”, apuntó la Casa de Estudios.
Por ello, exigieron a la administración “enmendar el rumbo, dar a conocer el plan estratégico y reconsiderar la forma en que se toman las decisiones al interior del Club, para así reponer las confianzas y el debido respeto que debe existir entre los miembros de un Club como la U”.