El hospital de Curicó ha demostrado ir a la vanguardia en la lucha contra el coronavirus, agregando esta vez un nuevo sistema de ventilación mecánica no invasiva para sus pacientes. Se trata de 7 aero-cámaras llamadas “Helmet”, que entregan oportunamente oxígeno a pacientes Covid que cumplan los criterios, disminuyendo sus probabilidades de ser intubados y requerir una cama de UCI.
César Bravo, Kinesiólogo de la UCI del centro de salud, explica que “nos estábamos viendo en la necesidad de ventiladores mecánicos no invasivos y había cierta evidencia que demostraba que estos equipos eran capaces de hacer lo mismo que un ventilador no invasivo, solo con un sistema de flujos conectado a la red, que generaba el mismo efecto y era muy beneficioso y eficiente en evitar intubaciones”.
Por su parte Marcela Urtubia, Kinesióloga de la UTI del mismo hospital, asegura que en las pocas semanas de uso de los Helmet, “los resultados han sido muy favorables, se evidencia clínicamente a los minutos de instalación, el paciente se siente cómodo, con menos dificultad para respirar, mejora su saturación y ellos dicen sentirse cómodos con el dispositivo”.
Sin embargo los pacientes deben cumplir con algunos parámetros de estabilidad en la condición de salud, pues “el sistema nos van a ayudar a oxigenar de mejor manera a los pacientes para evitar que sean intubados, pero siempre que cumplan los criterios de inclusión, básicamente que a nivel de conciencia estén atentos, vigiles y que cooperen”, describe la kinesióloga.
Es así como el día de hoy don Richard Duarte de 57 años se encuentra en una positiva etapa de recuperación, tras ser el primer paciente en recibir esta terapia de ventilación no invasiva. Al mismo tiempo, continúan recibiendo el tratamiento otros 4 pacientes, en la sala de UTI habilitada en el servicio de Agudos del establecimiento.
Finalmente César Bravo señaló que esto ha sido posible gracias a un trabajo conjunto con el Hospital de Quilpué y distintos profesionales del Hospital de Curicó. “Desde la doctora Ana Barone como encargada de la sala, los médicos de la UCI y de Agudos, los kinesiólogos, las terapeutas ocupacionales que han ayudado con la comodidad del paciente y evitar fugas de aire, los fonoaudiólogos con la alimentación, personal de enfermería con las ventanas terapéuticas, los técnicos en enfermería y todo el apoyo del doctor Canteros como jefe de la UCI”, sentenció.